Existen emociones relegadas dentro de cada individuo. Estas, salen a flote en momentos inadecuados o inesperados. Cuando ocurre, algunas personas no saben cómo reaccionar o cómo controlarlas.

La crianza de los padres, la educación en la escuela y el comportamiento de la sociedad pueden hacer que los seres humanos terminen aprendiendo a reprimir sus sentimientos. Hay emociones que, al ser expresadas a raíz de algún suceso; doloroso, disgustoso o vergonzoso pueden ser mal vistas por la familia o por el colectivo. Así se originan de forma inconsciente los sentimientos ocultos.

Sucede que, en un momento concreto o debido a la relación que se tenga con una determinada persona, esos sentimientos pueden aflorar de la manera menos indicada y salen inesperadamente a flote las emociones contenidas. Los sentimientos reprimidos generan otras emociones y ciscustancias que se van acumulando. Se crea rechazo, resentimiento y resistencia al no pder expresarlas adecuadamente.

Se refleja en el comportamiento de un vecino, amigo o familiar algo de lo que hemos ocultado en nuestro interior porque sin pensarlo nos sentimos identificados. Internamente se genera una fuerza para manifestarlo.  A veces hay comportamientos en otras personas que desagradan y la realidad es que es el reflejo de emociones escondidas. En otros caso la otra persona manifiesta en ti su malestar tratando de buscar tu ayuda para poder sacar a flote su dolor interno.

Cuando molesta el comportamiento de otra persona y esa persona recibe rechazo o rabia, lo que realmente se está reflejando es el repudio a la energía interna y al sentimiento enterrado. Inconscientemente, el rechazo y el reprimir sentimientos es muestra de la resistencia al cambio o a actuar de manera diferente. La resistencia tiene que ver a no querer hacerle frente a estos sentimientos dificiles y cambiarlos desde una energía mas elevada como la del amor. 

La recomendación es revisar es ir hacia nuestro interior y buscar la ayuda necesaria para afrontar la culpa, el miedo o el resentimiento, lo mejor es comenzar a hablar sobre lo que se siente y sucede internamente. Ese es el primer paso, ir expresando y sacando a flote todas las sensaciones que no permiten fluir los verdaderos sentimientos. Se puede conversar con la persona más cercana: amigos, pareja o familiar. Después de hacerlo, si aun el problema persiste es momento de buscar una ayuda mas experta y capacitada que te oriente adecudamente como liberarte de estas sensaciones

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