Conoce la esencia personal
El alma sería el lado inmaterial del ser humano, que nos da vida y aquello que forja su identidad. Entidad abstracta tradicionalmente considerada la parte inmaterial que, junto con el cuerpo o parte material, constituye el ser humano; se le atribuye la capacidad de sentir y pensar.
El alma incorporaría el principio vital o esencia interna de cada uno de esos seres vivos, gracias a la cual estos tienen una determinada identidad. Con el alma, el cuerpo adquiere vida, visión y oído, pensamiento y habla, inteligencia y emociones, voluntad y deseo.
Un alma no es sólo el motor de la vida; también encarna el por qué de la existencia de las cosas, su significado y propósito. Es la “identidad interior”, la razón de ser de las cosas. El principio vital en los seres humanos, acreditado con facultades de pensamiento, acción y emoción y a menudo concebido como una entidad inmaterial.
El budismo en particular, enseña que todas las cosas son cambiantes en un constante estado de flujo. Todo es pasajero y no existe algo perenne. Eso vale para todo el cosmos y por ende a la humanidad ella misma. No existe un “Yo” permanente. El error de creer en un “Yo” permanente es la fuente de los conflictos humanos y de los deseos mundanos. El alma está separada de todos estos deseos mundanos.
La reencarnación es la creencia según la cual, al morir una persona, su alma se separa momentáneamente del cuerpo, y después de algún tiempo toma otro cuerpo diferente para volver a nacer en la tierra. Por lo tanto, los hombres pasarían por muchas vidas en este mundo.
El alma está en continua evolución. Y las sucesivas reencarnaciones le permite progresar hasta alcanzar la perfección. Entonces se convierte en un espíritu puro, ya no necesita más reencarnaciones, y se sumerge para siempre en el infinito de la eternidad.
El cuerpo humano no es más que apariencia, y esconde nuestra realidad. La realidad es el alma. Víctor Hugo